Cada año la ciudad de solo siete mil residentes se convierte en escenario del que está considerado el evento más multitudinario de amantes de las motocicletas en el mundo, pero esta nueva edición, la 80, llama particularmente la atención por la compleja crisis de salud existente en la nación norteña.
En momentos en los que funcionarios de salud llaman a evitar incluso las reuniones pequeñas, el Sturgis Motorcycle Rally sigue planificado sin cambios, y se prolongará por 10 días.
No podemos evitar que la gente venga, declaró a la cadena de televisión CNN el alcalde de la localidad, Mark Carstensen, quien dijo que no hay mucho más que puedan hacer que no sea fomentar la responsabilidad personal, e instalar estaciones de saneamiento y distribuir máscaras, aunque no será obligatorio cubrirse la cara.
Sin embargo, residentes citados por el diario The Washington Post consideran que los funcionarios debieron cancelar el evento, y una encuesta sobre el tema arrojó que el 60 por ciento de los habitantes de Sturgis estaban a favor de que fuera pospuesto.
El administrador de la ciudad, Daniel Ainslie, dijo que el ayuntamiento ya había escuchado de miles de personas que estaban planeando hacer el viaje y que no tenían más remedio que prepararse para las multitudes.
Según Ainslie, tomaron en cuenta los daños y beneficios de realizar el rally, el cual impulsa no solo la economía local, sino también la de la región y el estado.
En un área donde tenemos tantos parques nacionales y dependemos significativamente del turismo, es muy difícil afirmar que debemos destruir toda la economía, solo para tratar de reducir la propagación de una enfermedad que todos han dicho que finalmente se propagará a la comunidad de todos modos, añadió, citado por CNN.
Datos mencionados por la cadena indican que Dakota del Sur ha reportado más de nueve mil casos del coronavirus SARS-Cov-2, causante de la Covid-19, uno de los registros estatales más bajos del país, y el condado de Meade, donde se ubica Sturgis, acumula alrededor de 78 infecciones.
Ante esos números bajos, el temor de muchos residentes es que quienes lleguen desde estados con una alta incidencia del virus provoquen un gran aumento de la transmisión.